el trabajo de buscar trabajo me abre las puertas a una oferta que, de serme concedida, colmaría gran parte de mis espectativas laborales y personales: formar parte de los efectivos del museo del castillo de san antón (el de coruña, no el de texas); mi labor consistiría en enseñarles a los visitantes la barca vikinga y todo ese tinglado, y cargar los cañones y disparar unas salvas con ellos de vez en cuando (el director del museo me ha advertido de que tienen un retroceso muy potente, así que tengo que plantarme firme antes de hacer fuego.)

BLANCA CONTRA EL CIELO AZUL#3

Sopla, ¡Oh mi dulce Virgilio! hasta caer de culo, abaja la faja y apaga el candil, haciendo del lunes otro sábado y de Antunes otro Sábato. Aún no estoy en el momento de "todo es una cosa", como dices tú, y por eso espero que me invites a merendar con tus narcolépticos favoritos y a ver pasar tu flota de renaults 5 mientras te escucho el chiste del rh. Empápame ¡Oh maestro! ¡Cartilla! de emoticonos para el sistema nervioso. No queda gasolina en la colina, ahá, cabrones, podrías decir... cuenta conmigo hasta cien.
No veo el día en que Blanca vuelva a leerme la mano con su lente de joyero para acto seguido atármela con cuerdas de marioneta y lanzarse, con quillas y cabestrantes, a lo más ignoto del ramillete.

Comentarios

maripeli ha dicho que…
He vuelto ^^ No sé cómo te pude abandonar así... Pero no miremos al pasado. Además del retroceso, procura controlar hacia dónde se apuntan los cañones. Hacia el mar, siempre hacia el mar, no me vayas a dejar sin morada...

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